El microblading es una técnica novedosa de maquillaje o pigmentación semipermanente que consiste no solo en diseñar la forma de la ceja para que resulte más favorable según las características de cada tipo de rostro, sino en trabajar la zona “pelo a pelo” para conseguir un resultado tan natural como favorecedor.
La técnica consiste en dibujar la ceja pelo a pelo para conseguir el resultado más natural posible, que aporte una mayor armonía en la cara.
Microblading tiene una duración aproximada de 18-24 meses en pieles normales y 12-16 meses en pieles grasas.
Estos casos son: embarazo, alergia a los pigmentos, antecedentes de queloides –crecimiento excesivo de tejido cicatrizante–, si padeces diabetes, hemofilia o hepatitis, o si se están tomando medicamentos anticoagulantes
El microblading es muy preciso y se usa para no dañar la piel ni las cejas. Además no duele porque se usa una crema anestésica. Se recomienda a todas aquellas personas que tengan las cejas muy escasas o que deseen rediseñar la mirada para potenciarla. El proceso suele durar unas dos horas.